ADIÓS A UN CAMPEÓN
Por: Roberto Montoya Martínez
Octubre 23 de 2024.
El rey de los deportes se ha cubierto con el negro crespón del luto. Toda una personalidad jugó su último juego de pelota, y su salud le cantó el out 27.
Durante los años 80 fue lanzador estrella de Los Dodgers de Los Ángeles, y de un tiempo a la fecha, se desempeñó como comentarista de los juegos de la pelota caliente para un canal local. Sin duda, todo un personaje.
Representó bien al baseball mexicano en los Estados Unidos. Lamentablemente, su salud lo ponchó y lo retiró definitivamente del servicio activo. Aunque ya no estaba en el montículo de los lanzamientos, su nombre seguía teniendo resonancia.
Recordemos juntos, con la fuerza del corazón, al famoso toro de Etchohuaquila, Fernando Valenzuela.
Fernando Valenzuela Anguamea, conocido como Fernando El Toro/El Torito Valenzuela, nació en Etchohuaquila, Navojoa, Sonora, México, el 1 de noviembre de 1960.
Fue un beisbolista mexicano que jugó en las Ligas Mayores 17 temporadas desde 1980 a 1997, con seis equipos, el primero fue Dodgers de Los Angeles; aquí destacó como pitcher zurdo para lanzar y batear. Su récord en su carrera de ganados y perdidos fue de 173-153, con un promedio de carreras limpias (ERA) de 3.54 en ligas mayores.
Notable por su heterodoxa forma de lanzar, fue uno de los pocos pitchers que dominaba el lanzamiento de screwball (tirabuzón), siempre fue un lanzador duro, y los Dodgers sentían que él necesitaba otro lanzamiento. Aprendió a lanzar el screwball en 1979, de su compañero de equipo Roberto “Babo” Castillo.
Valenzuela jugó, después de recibir el apoyo de Carlos Gabriel Martínez el Chivo, con los Tuzos de Guanajuato cuando éstos eran parte de la Liga Central Mexicana de Beisbol.
Fue contratado por los Dodgers el 6 de julio de 1979 y debutó más tarde en la temporada de 1980. En 1981, llegó el fenómeno llamado Fernandomanía, de donde pasó de un bajo perfil a una superestrella del deporte. Ganó sus primeros ocho juegos en línea (cinco de ellos por blanqueada).
Valenzuela terminó con récord de 13-7 y un promedio de carreras limpias de 2.48. Esta temporada fue recortada por la huelga de peloteros.
Es el primero y hasta ahora el único jugador en ganar ambos premios: Cy Young otorgado al mejor pitcher y el de Novato del Año en la misma temporada en la Liga Nacional.
Es el pitcher con mejor estadística desde la temporada 1981 hasta 1986. Fue nominado por la Liga Nacional al Juego de Estrellas en cada temporada y ganó 21 juegos en la temporada de 1986, perdiendo su segundo Cy Young ante el Mike Scott de Houston Astros.
Es uno de los mejores pitchers bateadores de su era. Tiene diez jonrones en su carrera y fue ocasionalmente utilizado por el mánager de Los Angeles Dodgers, Tommy Lasorda, como un pitcher bateador. El ocaso de la carrera con los Dodgers comenzó con la disminución de su efectividad debido a una lesión en su hombro que empezó a dar problemas
Estuvo en la Serie Mundial de los Dodgers en 1988, pero no jugó en la postemporada debido al hombro lesionado. El 29 de junio de 1990, lanzó su único juego sin hit ni carrera en las Ligas Mayores contra St. Louis Cardinals, ganando 6-0. Este juego fue notable por haber sido el segundo juego sin hit ni carrera de ese día.
Más temprano, el pitcher derecho Dave Stewart de Oakland Athletics había dejado sin hit ni carrera a Toronto Blue Jays, en Toronto, Ontario, Canadá y ganando 5-0. Este ha sido el único momento en la historia de las Ligas Mayores que hubo dos juegos sin hit ni carrera el mismo día.
Posteriormente, después de esa temporada, Valenzuela fue dejado en libertad por los Dodgers. Continúa su carrera en la Liga Americana con California Angels, Baltimore Orioles, regresando a la Liga Nacional con Philadelphia Phillies, San Diego Padres, y terminaría su carrera en las Ligas Mayores con St. Louis Cardinals. Se retiró después de la temporada 1997. En el 2003 regresó a los Dodgers como comentarista. En el 2015 obtuvo la ciudadanía estadounidense.
Fue dueño, junto con otros inversionistas de Yucatán, de los Tigres de Quintana Roo, equipo de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) Triple A desde 2017 con sede en Cancún. En 1981, Valenzuela se casó con Linda Burgos, una maestra de escuela de Yucatán, México.
Al principio de su carrera, viajaba con su familia en el receso de las temporadas entre las ciudades mexicanas de Etchohuaquila, Sonora, y Mérida, Yucatán. La pareja tuvo cuatro hijos.
Uno de sus hijos, Fernando Jr. “El Torito”, jugó en los Padres de San Diego y los Medias Blancas de Chicago como primera base. Desde el 2006, juega en las ligas menores de béisbol en México o en ligas independientes.
Valenzuela obtuvo la ciudadanía estadounidense el 22 de julio de 2015, en una ceremonia realizada en el Ayuntamiento de Los Ángeles. Participó en dos desfiles de las Rosas: en 1983, a bordo del flotador del gobierno de México, y en el 2008, a bordo del flotador de Los Angeles Dodgers.
El 30 de septiembre del 2024 fue hospitalizado en Los Ángeles, California. Falleció el 22 de octubre de 2024 en Los Ángeles, California, tras estar semanas hospitalizado.
Con lágrimas en los ojos y tristeza en el corazón, le decimos adiós a un campeón. El recuerdo de sus lances y sus jugadas, quedarán por siempre en la memoria de quienes lo vimos jugar, portando la casaca de los Dodgers de Los Ángeles.
Un digno ejemplo a emular para la juventud. El número 34 nunca más lo portará nadie, pues es de él, quien colmó de gloria y triunfos al equipo angelino, que fue donde hizo carrera en la gran carpa.
Fernando no ha muerto. Simplemente firmó contrato con otro equipo y lanzará su primer juego en la liga celestial. Buen viaje, Toro. Y gracias por los buenos momentos.
POR TODO LO QUE NOS DISTE Y LO QUE EN VIDA FUISTE
MUCHAS GRACIAS FERNANDO VALENZUELA DONDE QUIERA QUE ESTÉS
(1960-2024) Q. E. P. D.