PARTIDO SINALOENSE. FRUSTACIÓN ¡NO! DECEPCIÓN ¡SI!


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Héctor Melesio Cuén Ojeda fue claro y categórico al expresar que en la próxima elección se buscarán candidatos identificados y comprometidos con el Partido Sinaloense.

Lunes 4 de abril de 2022.

Competir con personas que no tienen arraigada la convicción pasista, se corre el riesgo de que una vez entronizados en el puesto para el que se les propuso, decidan renunciar para sumarse a intereses opuestos del partido político que los postuló.
Un sabor amargo que debe aguantar Héctor Melesio Cuén cuando dos Presidentes Municipales y tres diputados en el Congreso deciden separarse del Partido que los postuló y como si nada, siguen ejerciendo dichos cargos.


La volatilidad en las convicciones debe castigarse. Las ambiciones políticas personales ocultan en muchas ocasiones el interés real de formar parte de un partido político. Pero hay casos en que un postulado surgido de las filas que lo llevó al poder se separa. Es aquí donde hay que analizar cual es la causa porque que no es igual a la de los políticos oportunistas.
Las decisiones internas dentro del PAS pudieron ser la causa de que dos Presidentes Municipales decidieran separarse del Partido que los hizo ganar la elección. En un caso, la militancia estaba probada dentro del PAS, debió ser reconsiderada la decisión tomada. En el caso, de El Rosario, el arribo al PAS fue coyuntural y no por convicción.
Cosalá, debió ser motivo de un análisis profundo. Quizá no representaban muchos votos, pero uno que sea del PAS era valioso y debió ser protegido. Es un municipio electoral, el número cuenta mucho, porque no es igual decir gane en un municipio a decir no gané ninguno. Es un referente político para un partido que avanza y busca posicionarse en el electorado estatal.
El oportunismo solo se delata. La convicción volátil de inmediato desaparece. Alcanza su objetivo y siempre busca el pretexto para deslindarse del partido que lo llevó al triunfo electoral. Como dijo el Gobernador, en política las sorpresas son muy comunes. Hoy estás en un partido político y otro día estás en el que te haya ofrecido más. Así lo quiero interpretar. Cuestión de moral y ética política


Las deslealtades del militante o del candidato con el partido político que lo postuló y obtuvo el triunfo electoral, deberían castigarse con la pérdida de la posición electoral que alcanzó. Aun cuando vayan en coalición o candidatura común. Puede sonar aberrante el comentario de quien esto escribe, pero del artículo 41 de la Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos, se establece que los partidos son entidades de interés público, con derechos, obligaciones y prerrogativas y como organizaciones de ciudadanos hacer posible el acceso al ejercicio del poder público.
No hay que confundir la parte que dice que los ciudadanos y ciudadanas podrán formar partidos políticos y afiliarse libre e individualmente a ellos, pero ello no quiere decir que una vez postulados por el partido político con el que compite electoralmente sea utilizado solo para arribar al poder sin que sea sancionada su deslealtad.
En la ley electoral, debería estar regulado que aquellos candidatos que fueron postulados por un partido político y que hayan alcanzado el triunfo electoral por el mismo, en caso de renunciar o a formar parte de dicho partido, la posición electoral alcanzada deberá extinguirse también por ese hecho y llamar al suplente para sustituirlo.
Tres Diputados también se separaron del Partido Sinaloense. Se dijo que había mano negra en la decisión tomada. Que influyeron funcionarios del gobierno estatal. Lo que haya sido. Lo cierto es que un partido político, debe tener prerrogativas para sancionar ese tipo de deslealtades.

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