Se empieza a agitar a grupos de alumnos y maestros en algunas escuelas y facultades de la UAS. Esa provocación es peligrosa señores del gobierno.
Jueves 16 de marzo de 2023.
No han sido capaces del convencimiento social de que la Ley de Educación Superior de Sinaloa no es violatoria de la autonomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa, ni con los apurados despliegues de diputados mandados por Feliciano Castro a algunas asociaciones de Abogados y a municipios afines al gobierno, porque no han logrado convencer a nadie.
Se desesperan y recurren al manipuleo de alumnos y maestros por indicaciones de Feliciano Castro. Se exponen los maestros a ser despedidos y en su caso a los alumnos a ser expulsados, quieren víctimas y las autoridades universitarias deben ser prudentes y no caer en el perverso juego de los que siempre tuvieron a la Universidad convulsionada en suspensiones y paros.
Recurren a la exposición de mantas en los puentes peatonales al estilo de los grupos mafiosos que sirven al gobierno. No es a las autoridades universitarias a quien se debe de exigir información por esos medios porque sus autores solos se descubren ¿Quién autorizó no pagar impuestos de un sector de trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa y quien pactó pagar horas extraordinarias sin trabajarlas?
Pero también hay otro pacto que no se ha dicho, y que también lo carga el mermado presupuesto universitario. La jubilación dinámica que fue negociada en la Universidad Autónoma de Sinaloa sin ser reconocida por la federación; sin embargo, se ha tolerado y pagada a sus beneficiarios. El otro pacto, es el que aparece por allá en 1996 a través de un Acuerdo del Consejo Universitario en el que se aprueba jubilar al personal de confianza con su salario promediado y puesto, cuando sabido era que esa prestación tenía como destinatarios a los miembros del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa (SUNTUAS).
Fallas en la administración han sido muchas, pero no en los rectorados del 2005 a la fecha. En estos últimos han hecho crisis los desaseos del pasado. La Universidad debe ser protegida de las ambiciones políticas de control gubernamental. La UAS ha ganado posición social, confianza y credibilidad por la educación de calidad que imparte, en la que las familias sinaloenses la quieren para sus hijos. Hoy se corre el riesgo de llevarla al caos y a la destrucción.
La sociedad debe estar alerta y acudir al llamado de ser necesario para proteger ese espacio que tanto buscan los jóvenes para abrevar de las enseñanzas de la creación de Buelna. El futuro profesional de sus hijos lo encontrarán en las aulas de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Hay funcionarios del gobierno que afirman que llevarán el conflicto hasta que la Universidad erupcione. Tienen mercenarios dentro de ella, pero no avanzarán frente a una comunidad universitaria que los espera impaciente para poder golpear esas mentes perversas y juzgarlas públicamente.
Muchas horas y gastos desmedidos por los diputados del Congreso en difundir para defender lo que no tiene defensa. Han presionado a los jueces federales para que dicten resoluciones que desechen los amparos y que nieguen las suspensiones provisionales. También en eso han fallado porque suspensiones se tienen y la gran mayoría de los amparos promovidos se han admitido.
Reiteramos como sociedad la confianza en los jueces federales, porque estamos seguros de que esa Ley inconstitucional y violatoria de la autonomía de la Universidad quedará anulada. No es solo la voluntad deseada por quien lleva la defensa técnica, es también la argumentación cuidada en cada uno de los amparos solicitados. La Universidad Autónoma de Sinaloa, no se toca.
¿Usted qué opina?
