LO DIJO MONTOYA, 21 DE MARZO DE 2023.


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RECORDAR ES VIVIR 1° PARTE

Por: Roberto Montoya Martínez

Martes 21 de marzo de 2023.

En estos tiempos donde la nostalgia más que un sentimiento, se volvió una estrategia de marketing, quise revivir parte de mi pasado en XENW.

Para ello invité a platicar a una compañera de armas, que al igual que yo, dejó los micrófonos de la radio comercial por convenir así a sus intereses.

En 22 años de trayectoria hizo tanto radio como TV. Tuvo la oportunidad de alternar con locutores legendarios, condujo noticieros, y tuvo un programa infantil exitoso.

Ella es Patricia Castaños, quien revivirá para nosotros los hermosos momentos de su vida dentro de los medios.

GUSTAVO ESTRADA Y LOLITA ORONA: MIS PADRINOS

“Mis inicios en la radio fueron en Grupo Acir, contando con el apoyo de la señora Leticia Carrillo (QEPD).

Mi llegada a esa cadena fue en 1988, gracias a que mi madre, que en sus épocas de juventud era discotecaria en la emisora XESA, tenía trato con Gustavo Estrada, señor de todos mis respetos, y Lolita Orona. 

Gracias a la intersección de ellos logré entrar a la cadena a fin de probar suerte. Me pusieron a hacer prácticas de locución, partiendo de que yo era totalmente ajena al ambiente radiofónico.

Para el efecto, estaba cursando la carrera de Técnico Dental, la cual hice en dos años, y que por cierto, jamás ejercí.

Lejos de poner los dientes, los quitaba. Ja ja ja ja. Volviendo al punto, Gustavo y Lolita me presentaron con la señora Carrillo, y al momento hubo una conexión entre ella y yo.

Fue así como entré a la plantilla de locutores de XEEX, que pertenecía en ese entonces a Acir y que tenía por nombre comercial RADIO FESTIVAL. A partir de ahí sucedieron cosas buenas”.

EL CERTIFICADO DE LOCUCION O MORIR

“Me fui a México a realizar mi examen para obtener mi certificado como locutora. Lo pasamos satisfactoriamente, pese a que no se tenían muchas expectativas. 

Que me perdone Jorge Idraín, pero él lo presentó ocho veces y al final lo pasó. Contrario a mí, que a las primeras de cambio lo aprobé.

Recuerdo que Ramón Pérez, que al igual que yo era novicio en la radio me dijo –Si no apruebas el examen y traes tu certificado de locución, mejor ni regreses a la cabina- y fue así que en 1989 cuando partí a la capital a presentar el dichoso examen, el cual estudié minuciosamente, ya que era harto difícil.

Hice escala en Guadalajara, y transbordé un tren para irme al entonces Distrito Federal. Durante el camino escuchaba la Ley Federal de Radio y Televisión en un walkman.

Era como quien dice, mi audio libro. Y en enero de 1990 pude certificarme como locutora profesional por parte de la Secretaría de Educación Pública, categoría A.

Mis inicios en Grupo Acir fue una etapa maravillosa, pues conocí a grandes compañeros y me trataron bastante bien. Fue un tiempo muy hermoso”.

MI PRIMERA ETAPA EN XENW

“Como todo en la vida es cíclico, me reubicaron a XENW, donde tenía que cubrir la plaza de Hilario Gastélum, haciendo turnos de descansera y suplente.

Te confieso que iba llena de miedo, ya que don Héctor Ramos (QEPD) no tenía por costumbre contratar a locutoras. Apenas tenía 20 años y me fui con mi orden de trabajo del sindicato a cubrir el interinato, y para mi buena suerte, el señor Ramos me aceptó, previo a esto me leyó la cartilla –Aquí se viene a trabajar- cosa con la que estuve de acuerdo con Don Héctor.

Permanecí un ratito en esa emisora donde cultivé la amistad con estos señorones del micrófono, algunos se fueron, otros siguen aquí, tanto en activo como en retiro.

Te estoy hablando de Jesús Félix Ávila, Silviano de la Mora, Jorge Papachoris, José Luis Espinoza, el propio Hilario Gastélum, el Licenciado Camacho, en fin, pura personalidad”.

DE LA RADIO A LA TELE

“Permanecí en la NW hasta que me fui a la televisión. Humberto Astorga, que en gloria esté, fue mi descubridor.

Él estaba trabajando para Canal Tres, hoy TVP. Lo que siempre me ha distinguido es que siempre mostré respeto a todos mis compañeros. Apenas era una jovenzuela que pasaba de los 20 años, y ellos ya tenían carreras consolidadas, literalmente me doblaban la edad.

Puedo considerarme privilegiada de haber aprendido de estos grandes maestros de la locución. Gracias a Humberto Astorga trabajé durante cuatro años en el canal de televisión.

Lo mismo fui locutora grabadora, lo mismo vendía publicidad. Incluso hice un programa musical, teniendo por escenario el Parque Culiacán 87, que por cierto, recién abría sus puertas al público, teniendo por artista invitado a El Lobito de Sinaloa.

Fue una época muy hermosa la que viví en Canal Tres. Tuve la oportunidad de entrevistar a Los Tigres Del Norte, salí a cuadro, hasta fui conductora de noticias junto a Lucy Beltrán. Me tocó ver llegar a Eneida Palazuelos y a Fausto Castaños.

Sobran nombres para mencionar en esta relación. Fue una bonita etapa sin duda en Canal Tres, de la cual tengo bellos y gratos recuerdos”.

UNA LOLITA AYALA EN CIERNES

 “Recuerdo un día que Guillermo Alemán, que por entonces era director del área de noticias, había convocado a un casting para elegir a una nueva conductora del noticiero. A él lo trajeron de la capital. La cola era enorme.

Al salir de la cabina de grabaciones, comencé a curiosear y pregunté a que se debía ese mar de gente, me respondieron que habían convocado a casting para el noticiero. Lucy Beltrán era la titular, y enrique Santoyo daba las noticias deportivas.

Lo que se requería era a otra chica que estuviera de co conductora del espacio en cuestión. Por no dejar, le pedí al señor alemán que me diera la oportunidad de hacer mi prueba, a lo cual aceptó, aunque para ello todo mundo se había marchado.

Recuerdo que me senté en el set de noticias, hice mi prueba, y sin más ni más me quedé con el puesto. Conduje las noticias de la tarde una buena temporada.

Eso implicó que entrara dos horas antes a trabajar, ya que yo hacía la guardia de la tarde en grabaciones.

Entraba a las 3 y salía a las 7 p.m. Yo tenía que llegar temprano para preparar el programa y salir a cuadro.

Para mi buena suerte no fui reportera, pero fue gratificante la experiencia de estar a cuadro leyendo las notas bajando la mirada, pues no contábamos con teleprompter. De mi etapa en la tele, fue lo que más disfruté, mi etapa de noticierista”.

Si bien dicen que recordar es volver a vivir. Ya nos platicó todo lo relativo a su paso por Grupo Acir y la tele. En la próxima entrega nos platicará sobre su estadía en XENW, donde dejó 9 años de su vida. No llores amiga, nomás acuérdate.


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