DESAPARICIÓN FORZADA Y CAMPOS DE EXTERMINIO


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Gobiernos permisivos o cómplices de la corrupción, permite que se encuentren hallazgos horrorosos como el campo de exterminio en Tamaulipas.


Homicidios masivos cual, si se tratara de una película de terror o algo similar a lo sucedido en los campos de concentración en la Alemania Nazi, de la segunda guerra mundial.

¿La sociedad podrá creer que las autoridades no hayan tenido conocimiento de un hecho que debe ser motivo de vergüenza internacional, en un País donde se vocifera que la democracia es un baluarte de la estabilidad política nacional?

¿Será suficiente que se diga que el campo de asesinatos masivos dentro del territorio nacional es causa de las guerras intestinas que libran los diferentes grupos criminales que luchan para ejercer dominio sobre determinados territorios?

La corrupción sin duda debe ser la premisa de tan grave descubrimiento. La colusión de las autoridades con miembros de la delincuencia organizada es factor determinante para que esos hechos sucedan.

Complicidad es igual a impunidad, porque una autoridad comprometida con el narco no investiga y tampoco castiga. Mucho se ha dicho y se sigue diciendo que quienes arriban al poder político llevan una gran pieza de compromisos con miembros del crimen organizado.

¿Las notas de prensa hablan de miles de fragmentos humanos encontrados, otras refieren que se pesan por toneladas, pero a quien se le podrán atribuir esos hechos criminales? ¿A las bandas criminales que rivalizan por el control de territorios o mercados de la droga?

¿La complicidad mencionada se aprovecharía también para la desaparición de personas por motivos diferentes al crimen organizado? Lo cierto es que las autoridades tendrán un compromiso muy exigente para informar la verdad de lo sucedido en ese lugar, pero también para que se conozca la identidad de las victimas asesinadas.

La Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas Contra las desapariciones Forzadas, establece normas jurídicas aceptadas por México en las que se compromete implementar todos los procedimientos que sean necesarios para prevenir ese hecho que degrada a cualquier autoridad.

Si el Presidente de la República tiene la voluntad política de abatir corrupción e impunidad, este hecho puede ser el detonante para que el discurso de promesas se convierta en resultados de castigo para quien haya intervenido en el asesinato masivo de personas.

¿Sino hay policía civil porque la están exterminando, las fuerzas armadas tendrán la capacidad de investigar hechos que no son de su competencia y tampoco la formación para llevar a cabo esas funciones? ¿El gobierno de la república le apostará a la Guardia Nacional, que es el mismo ejército, para resolver tan grave situación criminal en Tamaulipas?

Todavía el olor que se despide en algunas áreas de gobierno es muy fétido. ¿Habrá otros campos de exterminio en el País que todavía no se descubran o no los quieren delatar?

Las notas de prensa fueron muy destacadas con el hallazgo tamaulipeco. Hoy dejaron de difundirse en los diarios nacionales y locales. ¿Qué ocurriría?

La inseguridad sigue cabalgando y adopta figuras de terror. El gobierno se resiste a implementar un sistema policial civil de carrera y profesional.

¿usted que opina?


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